«Estamos aquí para dar un servicio a los mayores, así de
sencillo». Con esta frase sintetiza José Sanchis, presidente de la
federación valenciana de la Unión Democrática de Pensionistas (UDP), la
labor de su institución. Ésta consiste en «promover actividades para los
jubilados y defender sus derechos». «Organizamos olimpiadas, semanas
culturales, viajes y programas de voluntariado», enumera el dirigente,
que añade que también median ante la administración para «anta casos de
abuso o maltrato»
Fue en 1977, todavía con la legislación franquista vigente,
cuando arrancó en Valencia la UDP en el Ateneo Marítimo del Cabanyal.
Según Sanchis, fue la pionera en España «en la reivindicación de las
pensiones y el resto de derechos de los jubilados». Su organización
centralizada en la capital del Turia poco tardó en extenderse por los
diferentes pueblos a través de subsecretarías que, a día de hoy,
aglutina a un total de 300 asociaciones y 200.000 socios en la
provincia. «Estamos en 19 comarcas. A nivel nacional somos dos millones
de socios. Ningún partido político tiene tantos afiliados», indica el
presidente.
A la labor tradicional de la UDP, de origen más
reivindicativo que lúdico, se han ido adhiriendo diferentes actividades
de cuyo éxito presume Sanchis. «El proyecto estrella es el de
voluntariado», subraya. Éste consiste en la labor de 800 jubilados
voluntarios que acuden una hora a la semana al domicilio de pensionistas
que viven en solitario para hacerles compañía. «Es inimaginable el bien
que hace este programa. Hay mayores a los que le cambia la vida ganar
una amistad. Muchos acaban convirtiéndose después en voluntarios»,
cuenta.
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